Las alfombras grandes influyen en la decoración del interior de una casa de forma visual.  A través de una alfombra se transmite confort y personalidad a un hogar. Son imprescindibles y muy usadas si lo que se quieres es trasladar esa sensación de calidez y comodidad a una estancia.

Alfombras grandes para el salón

El salón y el comedor son los lugares de la casa donde reinan las alfombras. Si el espacio lo permite usar las alfombras en tu salón como separador de espacios es una muy buena práctica que es posible realizar con alfombras grandes. Un buen ejemplo puede ser poner una alfombra mayor en la zona del sofá y la otra en la zona de la mesa para dividir los dos ambientes dentro del mismo salón. Ten en cuenta que sean alfombras que se puedan usar en cualquier estación del año.

Alfombras grandes para la habitación

Aunque siempre la decoración es cuestión de gustos. Es muy común clocar una alfombra a cada lado de la cama. La tendencia actual es añadir una alfombra de mayor tamaño delante de la cama para aportar comodidad y modernidad a la habitación.

Alfombras grandes para la terraza

Si dispones de una zona exterior o terraza grande, una buena opción es añadirle una gran alfombra que le de un toque acogedor y de comodidad. Para los exteriores es aconsejable un material natural y resistente. Intenta que no sea un lugar de la casa expuesto a la humedad, sino que más bien le de el sol la mayor parte del día.

Si no te has decido entre elegir una alfombra grande o combinar varias alfombras pequeñas, te ayudamos a descubrir las ventajas de usar una alfombra grande en tu decoración de hogar:

Dan orientación a la habitación

En un espacio grande como puede ser un salón, una alfombra grande situada en el centro sirve para orientar la estancia. Crear un espacio y distribución dentro de esa habitación ayuda a diferenciar diferentes ambientes y situar adecuadamente los muebles.

Proporcionan armonía de color

Las alfombras grandes con el mismo color que el sofá o las paredes de una habitación transmiten sensación de armonía. Esto es así porque el mismo color tanto en la alfombra como en los muebles o/y en las palares ayudan a crear un patrón visual del lugar donde son situadas. Los colores neutros como el blanco o el gris proporcionan esta sensación de armonía y tranquilidad a un salón o una habitación amplia. Si decides colocar una alfombra en el salón ésta debe ser grande ya que debes situarla debajo del sofá, de forma que nadie se tropiece.

Es posible también obtener esa conexión cromática con las alfombras que tienen algún diseño o dibujo que combina con los colores de la habitación o con los muebles. De este modo esta combinación de colores refuerza y aumenta la sensación de equilibrio en un lugar. Si, por ejemplo, se sitúa una alfombra grande bajo la mesa con el color de las sillas el resultado que se obtiene de la combinación es una armonía del conjunto en sí.

Crean efecto 3D

La textura de una alfombra grande marca la diferencia entre una habitación u otra. Como puede ser un salón o un dormitorio. Las alfombras con tejidos largos de un solo color dan mucha personalidad a un dormitorio o a un salón.